Volvemos a la cita habitual con las intenciones o los objetivos de costumbre. Sin más dilación comencemos.
En mi opinión el lugar más emblemático de Mozos de Cea no creo equivocarme si digo que es el paraje conocido como "Las Barreras". Ese humedal que sobradamente conocéis y que se encuentra próximo al casco urbano. Es de suponer que su nombre se debe a que el fondo de este humedal, en toda su extensión, tiene una gruesa capa de barro. Lo que no admite ninguna duda es que años atrás fue el centro neurálgico del pueblo por no tener el caudal de un río cercano. Antiguamente siempre resultó de gran utilidad el agua de este humedal. En especial para los animales de tracción que tenían en sus cuadras los vecinos del pueblo, los cuales empleaban para faenar las agotadoras labores agrícolas. Este lugar siempre les sirvió de abrevadero. A continuación nombraré alguna otra utilización más que se le dio a este agua, con relación a aquella época remota que yo viví in situ, tan cargada de estreches y extenuantes jornadas de trabajo en el campo. Alguna creo que pudiera resulta un tanto variopinta. No se. Os cuento.
En mi opinión el lugar más emblemático de Mozos de Cea no creo equivocarme si digo que es el paraje conocido como "Las Barreras". Ese humedal que sobradamente conocéis y que se encuentra próximo al casco urbano. Es de suponer que su nombre se debe a que el fondo de este humedal, en toda su extensión, tiene una gruesa capa de barro. Lo que no admite ninguna duda es que años atrás fue el centro neurálgico del pueblo por no tener el caudal de un río cercano. Antiguamente siempre resultó de gran utilidad el agua de este humedal. En especial para los animales de tracción que tenían en sus cuadras los vecinos del pueblo, los cuales empleaban para faenar las agotadoras labores agrícolas. Este lugar siempre les sirvió de abrevadero. A continuación nombraré alguna otra utilización más que se le dio a este agua, con relación a aquella época remota que yo viví in situ, tan cargada de estreches y extenuantes jornadas de trabajo en el campo. Alguna creo que pudiera resulta un tanto variopinta. No se. Os cuento.
Hace muchos años atrás: (pongamos que hablo del año catapún)
.- A comienzos del otoño, días antes de iniciar la vendimia, se sacaban las vasijas o toneles de las lagares y se las llevaba a las barreras para lavarlas. Allí mismo se las llenaba de agua y se dejaban que reposaran unos días para que hinchara la madera con el fin de llenarlas luego de vino.
.- Dentro de aquel agua se introducían los sacos que contenían los altramuces (chochos) cocidos. Permanecían dentro del agua varios días hasta que desapareciera su amargor. ( Os cuento que el raterillo de turno aprovechaba la ocasión para afanar algún puñado de aquellos altramuces)
.- Allí se lavaban los cardos que se recogían por los sembrados y una vez secados al sol servían para alimentar al ganado, en especial las vacas.
.- En este mismo lugar se cazaban ranas con rudimentarias cañas fabricadas a mano. De este asunto ya os hablé. Quien se molestó en su día en leer el texto sabrá de lo que hablo.
.- Era en este mismo sitio donde los niños de Mozos de Cea nos divertíamos lanzando piedras sobre el agua con mayor o menor habilidad, pero siempre tratando de que la piedra hiciera las mayores piruetas o saltos posibles sobre el agua.
.- También sirvió como pista de patinaje, pero sin patines, para la chavalería y los mozos del pueblo durante aquellos antiguos y gélidos inviernos cuando aquel agua se convertía en resistente hielo.
.- Antes de que reformaran las estructura de la antigua poza, en su agua, aparentemente limpia, las mujeres del pueblo acostumbraban a lavar la su ropa.
.- Esta agua sirvió en ocasiones para regar los pequeños huertos que los vecinos cultivaban cercanos a este lugar.
.- Lamentablemente en este lugar se llevaba a cabo una cruel costumbre como era el arrojar perros y gatos recién nacidos al agua para que murieran ahogados.
.- Lamentablemente en este lugar se llevaba a cabo una cruel costumbre como era el arrojar perros y gatos recién nacidos al agua para que murieran ahogados.
( En estas dos imágenes que corresponden a finales de la década de los ochenta, se puede observar las barreras cuando se hallaban en su estado original. También a los patos de Ana Mari nadando en su agua )
Si profundizo en la memoria estoy seguro que conseguiría recordar alguna que otra utilidad más que se le dio al agua de las barreras a través de los años. Pero no es cuestión de seguir enumerándolas para no aburrir o cansar. Las expuestas creo que son un válido ejemplo que cumplen sobradamente el cometido. Por otra parte, comentaros que por entonces también periódicamente a cuenta de la pertinaz y prolongada sequía, las barreras se secaban: tal como en la actualidad viene sucediendo cuando la lluvia brilla por su ausencia y la sequía hace estragos. Y eso que cuenta con pequeños manantiales, pero no son suficientes si en el invierno no llueve con abundancia y queda embalsada parte de ese agua caída dentro de su concavidad. Pues bien, cuando por entonces se secaban, cada vecino del pueblo obligatoriamente tenía que encargarse de limpiar una pequeña parte de ese lodazal seco que se le había designado. Labor que desempeñaban a base de azada y pala, supongo. Una vez cavado y apilado el lodo, se cargaba dentro de los carros para luego esparcirlo en sus pequeñas parcelas por que resultaba ser un excelente fertilizante para la tierra.
( Dos imágenes donde se puede percibir el estado actual de las barreras mostrando su encanto y colorido natural, sin esas antiestéticas "mazorquetas" que hoy en día se han apoderado del agua limpio y cristalino que se refleja en las imágenes)
Es obvio que todo lo arriba comentado ya es historia y que la realidad actual de las barreras es bien diferente a causa del transcurso del tiempo y sus inevitables circunstancias. Hoy en día como todos sobradamente conocéis este lugar ha sido transformado en una especie de parque y oficialmente el humedal es conocido como laguna "La Barrera". Que ha experimentado un cambio de look, no hay duda. Fue vallado todo el recinto exterior y para darle aspecto de un parque público, los propios vecinos y vecinas del pueblo fueron quienes arrimaron de forma colectiva el hombro en las populares hacenderas y transformaron este humedal y su entorno en un parque público con un sin fin de detalles, como la instalación de bancos y mesas . También se construyó un interesante puente de madera para poder llegar hasta la isla donde se encuentra la caseta de los patos. Una isla que se quedó en medio de la laguna cuando la retroexcavadora cambió su forma original. Y por supuesto que se contó con las necesarias subvenciones para sufragar los gastos que requería el realizar tan importante obra. El grupo de Acción Local Adescas subvencionó una parte, del resto se encargó la Junta Vecinal de Mozos de Cea. Una cosa que resultó muy importante a raíz de poner en marcha este proyecto, fue la reforestación que se hizo en todo el entorno de la laguna. Se plantó una considerable cantidad de arboles, de diferente variedad, y hoy en día configuran un atractivo y sugerente paisaje natural. Respecto al arbolado, voy a comentar algo anecdótico. Este que ahora escribe fue quien plantó el primer árbol en ese lugar. Lo hice en la primavera de 1991. En realidad fueron tres sauces llorones los que planté, pero sólo consiguió cobrar vida uno . Durante unos cuantos años fue creciendo en solitario, pero todo cambió a principios de este milenio cuando se empezó a plantar en aquel mismo entorno otros árboles de diferentes especies. Por otra parte, hoy en día se da una circunstancia que hace que el humedal no resulte para nada atractivo por culpa de esas plantas a las que popularmente se las conoce en el pueblo como "mazorquetas" y que han crecido con tanta abundancia que en la actualidad parece haberse apoderado de todo el espacio interior de la laguna. Apenas si dejan ver el agua. Una lástima que se haya llegado a estos extremos. Recuerdo que por aquellos remotos años jamás se vio la presencia de esta planta invasora dentro del agua. Había por entonces en el pueblo una yegua propiedad de Epifáneo Morán Fernández que pastaba todos los días alrededor de la laguna y solía meterse dentro del agua para comerse los brotes de susodicha planta. Razón por la cual nunca consiguió crecer con esa antiestética y preocupante abundancia. Supongo que a quienes compete buscar alguna solución para hacer que desaparezca, la hallarán con el fin de este contratiempo no nos prive de volver a ver a la laguna mostrando su estético y sugerente encanto visual y de paso sin problema alguno que vuelvan a convivir en su hábitat natural las ranas, peces, cangrejos, pollas de agua, y demás especies que pertenece a la fauna de la zona.
( En esta fotografía sacada en 1971 podéis ver la yegua de la que os he hablado. Ella sola se bastaba para limpiar toda la maleza y las hiervas que crecían alrededor y dentro de la laguna)
Os he dejado breves pinceladas escritas, acerca del pasado y el presente de las barreras, actualmente convertida en parque público y también zona de recreo donde se convocan hacenderas para el mantenimiento del parque, y también se celebran comidas de confraternidad , se organizan bailoteos, se proyecta cine de verano , y cualquier otra "redondina popular" que se tercie para la ocasión. Y que no sigan faltando anualmente todos estos eventos cada verano porque ello es sinónimo de vida, de alegría, de futuro...Aunque lamentablemente todos sabemos que es sólo circunstancial; que la realidad por desgracia es otra más bien distinta. Pero viene siempre bien vivir el momento y disfrutar el instante. Y en ello estamos.
Por hoy, esto San se acabó. Si os molestáis en leerlo y os resulta grata experiencia su lectura...¿Qué más se puede pedir?
( Dos imágenes donde se puede percibir el estado actual de las barreras mostrando su encanto y colorido natural, sin esas antiestéticas "mazorquetas" que hoy en día se han apoderado del agua limpio y cristalino que se refleja en las imágenes)
Es obvio que todo lo arriba comentado ya es historia y que la realidad actual de las barreras es bien diferente a causa del transcurso del tiempo y sus inevitables circunstancias. Hoy en día como todos sobradamente conocéis este lugar ha sido transformado en una especie de parque y oficialmente el humedal es conocido como laguna "La Barrera". Que ha experimentado un cambio de look, no hay duda. Fue vallado todo el recinto exterior y para darle aspecto de un parque público, los propios vecinos y vecinas del pueblo fueron quienes arrimaron de forma colectiva el hombro en las populares hacenderas y transformaron este humedal y su entorno en un parque público con un sin fin de detalles, como la instalación de bancos y mesas . También se construyó un interesante puente de madera para poder llegar hasta la isla donde se encuentra la caseta de los patos. Una isla que se quedó en medio de la laguna cuando la retroexcavadora cambió su forma original. Y por supuesto que se contó con las necesarias subvenciones para sufragar los gastos que requería el realizar tan importante obra. El grupo de Acción Local Adescas subvencionó una parte, del resto se encargó la Junta Vecinal de Mozos de Cea. Una cosa que resultó muy importante a raíz de poner en marcha este proyecto, fue la reforestación que se hizo en todo el entorno de la laguna. Se plantó una considerable cantidad de arboles, de diferente variedad, y hoy en día configuran un atractivo y sugerente paisaje natural. Respecto al arbolado, voy a comentar algo anecdótico. Este que ahora escribe fue quien plantó el primer árbol en ese lugar. Lo hice en la primavera de 1991. En realidad fueron tres sauces llorones los que planté, pero sólo consiguió cobrar vida uno . Durante unos cuantos años fue creciendo en solitario, pero todo cambió a principios de este milenio cuando se empezó a plantar en aquel mismo entorno otros árboles de diferentes especies. Por otra parte, hoy en día se da una circunstancia que hace que el humedal no resulte para nada atractivo por culpa de esas plantas a las que popularmente se las conoce en el pueblo como "mazorquetas" y que han crecido con tanta abundancia que en la actualidad parece haberse apoderado de todo el espacio interior de la laguna. Apenas si dejan ver el agua. Una lástima que se haya llegado a estos extremos. Recuerdo que por aquellos remotos años jamás se vio la presencia de esta planta invasora dentro del agua. Había por entonces en el pueblo una yegua propiedad de Epifáneo Morán Fernández que pastaba todos los días alrededor de la laguna y solía meterse dentro del agua para comerse los brotes de susodicha planta. Razón por la cual nunca consiguió crecer con esa antiestética y preocupante abundancia. Supongo que a quienes compete buscar alguna solución para hacer que desaparezca, la hallarán con el fin de este contratiempo no nos prive de volver a ver a la laguna mostrando su estético y sugerente encanto visual y de paso sin problema alguno que vuelvan a convivir en su hábitat natural las ranas, peces, cangrejos, pollas de agua, y demás especies que pertenece a la fauna de la zona.
( En esta fotografía sacada en 1971 podéis ver la yegua de la que os he hablado. Ella sola se bastaba para limpiar toda la maleza y las hiervas que crecían alrededor y dentro de la laguna)
Os he dejado breves pinceladas escritas, acerca del pasado y el presente de las barreras, actualmente convertida en parque público y también zona de recreo donde se convocan hacenderas para el mantenimiento del parque, y también se celebran comidas de confraternidad , se organizan bailoteos, se proyecta cine de verano , y cualquier otra "redondina popular" que se tercie para la ocasión. Y que no sigan faltando anualmente todos estos eventos cada verano porque ello es sinónimo de vida, de alegría, de futuro...Aunque lamentablemente todos sabemos que es sólo circunstancial; que la realidad por desgracia es otra más bien distinta. Pero viene siempre bien vivir el momento y disfrutar el instante. Y en ello estamos.
Por hoy, esto San se acabó. Si os molestáis en leerlo y os resulta grata experiencia su lectura...¿Qué más se puede pedir?
Largas noches y plácidos días a todas y a todos.
prueba